VX | Capitulo 1

Las luces parpadeantes del techo son molestas, aunque casi no alumbran. El sonido que emiten cada vez que se encienden o se apagan, me pone nerviosa, me recuerda al tic tac de los relojes… yo siempre e sido de los electrónicos, no soporto el tic tac. Escucho también los ronquidos y respiraciones de más o menos diez chicas que se encuentran en la habitación, todas entre edades de 10 a 25, mas o menos, ya que sé que la más pequeña tiene diez y la más mayor tiene 25. No he socializado mucho con ellas, no tengo demasiado interés, me paso gran parte del día con mis hermanos gemelos de 14 años, pero como nos tienen separados por sexos intento pasar gran parte del día con ellos, en especial enseñándoles a pelear, como hace años me enseñaron a mí

He perdido la cuenta de los días que llevamos aquí, yo y creo que todo el mundo, pero creo que llevamos cuatro meses y no hemos pisado tierra en todo ese tiempo. El barco naval en el que nos encontramos suele viajar por las costas en busca de supervivientes pero nunca nos dejan bajar, es demasiado peligroso. A mis hermanos y a mí nos encontraron en una costa del norte de España, era un barco naval estadounidense, lo que sinceramente se me hacía extraño, pero todo ahora era diferente desde el brote de lo que llamamos VX, un virus, técnicamente mortal… ¿Saben esa gente que es o era fanática del tema zombies? pues bueno ahora mismo deben de estar viviendo su sueño. El VX es un un virus letal del que literalmente no tenemos ni idea, se contagia por contacto directo por la sangre o si bebes algo infectado o lo comes y cosas así. Por lo que supimos en un principio mata, y los que sobreviven se convierten en lo que casi todo el mundo llama zombies, pero sinceramente es mejor la muerte que convertirte en eso, no se les puede llamar humanos, se deterioran como los cadáveres, como si lentamente muriera, sabemos que su corazón late, sangran una asquerosa, viscosa y espesa sangre negra y solo se les puede matar si das directamente en el cerebro, aunque cortar cabezas también sirve, pero si les das en el corazón no pasa nada, siguen caminando y queriendo comerte. Supongo que saben como era nuestra idea de zombies ¿no?... lentos… pues la realidad es totalmente distinta, son rápidos y algunos hasta fuertes, bueno lo que se puede considerar fuertes, pero no son inteligentes por lo que esa es nuestra única ventaja sobre ellos.

El virus surgió aproximadamente hace un año, yo estaba en el cine; Cuando acabó la película, salí con mis amigas y se notaba el ambiente diferente, pero no sabría decir en que exactamente. A la mañana siguiente era todo un caos. Miraba por mi ventana y solo veía caos. No sé como logré sobrevivir días, pero comprendí que tenía que luchar, cuando por la ventana de mi apartamento solo veía cadáveres y nadie hacía nada para ayudarnos, me dí cuenta de que no podía quedarme a esperar a que la muerte viniera a buscarme, sobre todo cuando no estaba sola, tenía que buscar a mí familia, encontrarla, pero ellos vivían en la otra punta del país, lo bueno es que España no es un país grande cuando se compara con Estados Unidos, Rusia, Francia, o no se. Yo me encontraba en Barcelona estudiando Bellas Artes, y mi familia estaba en Madrid, tenía que encontrarlos. De alguna forma lo logre, pasé un calvario, si soy sincera en más de una ocasión pensé que iba a morir y tuve que hacer cosas que nunca hubiera hecho, pero lo logré. Cuando encontré a mis hermanos, que en ese momento tenían 13 años estaban con mi madre, mi padre al parecer había muerto por el virus. Poco después mi madre se suicidó, perdió la esperanza, pero yo no. Mis hermanos y yo sobrevivimos como pudimos hasta ahora.

He llegado a comprender que probablemente el 70% de la población mundial fue afectada por el VX, y que de ese porcentaje sólo un 15% realmente han muerto, eso nos deja un 55% de población mundial que son unos malditos muertos vivientes. También estoy segura que del 30% que no ha sido afectada un 10% a muerto por suicidio y un 5% por otras causas, eso nos dejaría solo con un 15% de supervivientes mundialmente. Por lo que he llegado a la conclusión de que básicamente estamos bien jodidos.

Una sonora y molesta alarma comienza a sonar, anuncia la mañana y que cada uno tiene que levantarse, es … nuestro despertador común. Ya estoy acostumbrada, pero cuando se está profundamente dormida y suena, lo único que quieres hacer es asesinar a alguien.. en serio. Pero cuando se detiene, suena otra, diferente, que no suena muy a menudo, es la que indica que estamos cerca de la costa para buscar supervivientes, pero no se en que costa estamos. Me levanto con rapidez, ya estaba despierta porque duermo poco, desde que todo comenzó duermo casi siempre con un ojo abierto. Me visto con rapidez, pantalones militares, camiseta negra de tirantes y unas grandes botas. Me recojo mi largo pelo rojo en un moño apretado para que no me moleste, y salgo con rapidez esquivando al resto de chicas que aún se están despertando.

Esquivo a la gente por los estrechos pasillos del barco. Actualmente en el barco hay gente de todo tipo, mis hermanos siempre me hablan de un divertido chico indio con el que se llevan bien. Puedes ver diversas culturas dentro, aunque no suelo prestarles mucha atención ya que lo único que me preocupa son los gemelos. Mi tarea hoy, que es día de costa es estar en la plataforma de cubierta con unos prismáticos junto a decenas de personas buscando supervivientes por la costa. Pero antes me dirijo al comedor, pero en vez de ir a buscar una bandeja y servirme algo de comida, entro directamente a la cocina, donde ya me conocen porque trabajo allí tres días de la semana, y hoy sería uno de esos días, si no fuera porque es día de costa.

Saludo al cocinero, que es coreano, con la mano cuando paso junto a el. Agarro lo primero que veo comestible y salgo por la otra puerta de la cocina. Minutos después de caminar por el laberinto del barco, salgo y una ola de viento frío me deja parada en el sitio. Murmuro y maldigo por no haber pensado en coger una chaqueta. Frotándome los brazos comienzo a caminar en dirección al borde, cuando agarro uno de los prismáticos que una persona está entregando, como siempre luego habrá que devolverlos.

Minutos pasaron y a pesar de la distancia y de lo que se lograba distinguir no había señales de vida, nosotros, las personas con los prismáticos teníamos que buscar por la costa, pero había otras personas que usaban algo más potente que un prismático de lo cual no se el nombre, para revisar los lugares que ya habíamos visto para asegurarse de que no nos habíamos pasado a nadie por alto. Reconocí el lugar, aunque nunca había estado lo supe, siempre había deseado venir, y nunca pensé que lo vería y mucho menos de esta forma. Era Los Ángeles, estamos en Estados Unidos. La última vez que habíamos estado en una costa fue en Indonesia donde pasamos días y recogimos aproximadamente a quince personas, y la verdad no tengo ni idea de cual es el limite de gente para el barco, pero ya somos muchos. Sigo mirando por los prismáticos cuando escucho a alguien gritar, pero creo que es un chillido de alegría, desvío la mirada del horizonte y busco el origen del grito. Una mujer, mayor, aproximadamente de unos 50 años, está agitando los brazos cuando la escucho gritar “¡Gente!”

Después de que hubieran enviado a tres personas a la costa -tres personas armadas hasta los dientes-, podía sentir la emoción en el barco, más supervivientes transmitía una sensación de esperanza, pero por alguna razón que no llego a comprender, yo no me sentía así, si no, que me sentía inquieta. Los gemelos, Daniel y Alvaro en algún momento llegaron hasta a mí, querían ser testigos. Ellos tan parecidos físicamente eran como el fuego y el agua en sus personalidades. Alvaro era extrovertido, muy activo, amante los deportes, cualquiera de ellos y lo dominaba en días, habla mucho, siempre sonríe y anima de forma inconsciente a la gente. Daniel, por su lado es callado y muy inteligente, él era de los que se encerraban en su cuarto a leer, estudiar y en alguna ocasión a jugar a los videojuegos, no es, ni ha sido nunca una persona de actividades, el era y es de hacer cosas con tranquilidad, creo que el único deporte, si se le puede llamar deporte, que le gustaba es el tiro con arco, es muy bueno en eso. Yo por mi parte soy una mezcla de ambos se podría decir.

Minutos pasan y la gente está emocionada, quieren ver a los “nuevos”, yo estoy atenta a cualquier cosa fuera de lugar. De alguna forma desconocida e llegado a parar a lo que sería la primera fila de espectadores a la espera de la llegada. Agarro de la mano a los gemelos y les aprieto con fuerza en señal de que no quiero que se separen de mí. Minutos pasan, y la espera ha acabado, veo a Jeff, es alguien del ejército, ni idea de cual es su rango, no tengo interés en saberlo, pero es la persona que siempre sale a buscar los supervivientes, me cae bien ya que me recuerda a mi padre, luego veo a Lauren, se la podría considerar una instructora porque se pasa todos los días enseñando a los supervivientes a pelear y como matar a los infectados, veo también a Matt, un buen tipo, a flirteado alguna vez conmigo, todas esas veces finjo que no se ingles. Después los veo, es un grupo pequeño, y todos tienen caras de haber pasado por el mismísimo infierno. Son siete personas, cuatro chicos y tres chicas. El primer hombre parece el mas mayor, es bajo, bueno mas bajito que yo, de pelo azabache y piel de color, con ojos marrones y expresión cansada, ropa sucia y manchada de sangre, aunque bueno todos al llegar vamos con las mismas pintas. Tiene un hacha en su mano, agarrada firmemente sin querer soltarla. La segunda persona es otro hombre, también mayor, andará por los 48 mas o menos, no puedo decirlo con seguridad porque el mundo como es ahora nos hace más mayores en aspecto. Tiene el pelo más rubio que e visto nunca, podría parecer blanco, pero tiene un brillo dorado a pesar de la suciedad, probablemente limpio podría parecer hasta oro, su piel es blanca, muy blanca, casi enfermiza, va igual vestido que el resto, sucio y con sangre, lleva una pistola en su cinturón y camina como si tuviera una leve cojera. La tercera persona es una mujer, creo está que embarazada, por su pequeño vientre y porque posa las manos en él como queriendo protegerlo… es un malísimo momento para estar embarazada, en mi opinión. Andará por los treinta y muchos, tiene el pelo negro, casi parece azul, corto, tiene una horrible cicatriz en su cuello, casi parece un zarpazo de un animal, sus ropas están más limpias que la del resto, lleva un machete colgado de su cinturón. La cuarta parece la más joven, es solamente una niña, probablemente tendrá los diez o once, pero sus ojos muestran una madurez normalmente vista en una persona adulta, lo que muestra haber visto mucho y cosas muy malas. Tiene el cabello rubio y es sumamente parecida al segundo hombre, por lo que supongo que es su hija. La tercera chica y quinta persona es joven, creo que tendrá mi edad o mas joven, rondará los diecinueve o los veinte. Tiene el cabello castaño y muy corto, un peinado de chico, probablemente para que no le molestara, tiene un aspecto feroz, sus ojos tienen ira, y supongo que esa ira va dirigida al mundo en general a pesar de los azules que son, probablemente en el pasado era una chica hermosa. Tiene el peor aspecto de las tres, la más sucia, y no se porque pienso que si el barco no nos hubiera recogido yo tendría el mismo aspecto que ella. Tiene una espada… no, perdón, una katana en su espalda, y sinceramente es una pasada, también una pistola en la cintura, y lo que parece ser una daga asomada en su bota. La sexta persona es un chico, parece solo unos años más mayor que yo, alto, su pelo es marrón, del color del chocolate diría yo, de piel morena, no puedo verle bien la cara por su pelo que tiene algunos mechones ligeramente más largos y además de que está mirando al suelo, puedo ver algunos pendientes y piercings en su oreja, además de un tatuaje tribal en su brazo izquierdo. Lleva colgando de su brazo un arma de largo alcance, un fusil, diría yo, además de una pistola también en el cinturón y una daga asomando de su bota. El séptimo y último hombre, parece ser también mayor comparando a los dos anteriores, por alguna razón no me da buena espina, sinceramente no se el porque pero no me agrada. Tiene el pelo muy corto, negro, ropas manchadas de sangre negra y roja, camina como si tuviera mucho dolor, aunque intenta no mostrar emoción alguna.

Jeff y Lauren hablan entre ellos, y escucho los murmullos de la gente del barco, seguramente opinando y juzgando a los nuevo, algo que creo que no deberían de hacer, pero yo no soy quien para decir nada. Intuyo lo que están hablando Jeff y Lauren, por ello agarrando con fuerza a mis hermanos decido desaparecer entre las personas, pero al darme la vuelta alguien me agarra del hombro, al girar lentamente la cabeza me encuentro cara a cara de Jeff, tenemos la misma altura, un metro ochenta. Me mira fijamente y gruño, se lo que me va a pedir y no quiero hacerlo, en serio que no, ya me ha tocado antes y no me gusta hacer de guía turística para los nuevos. Por ello antes de que me diga nada, me vuelvo a girar y miro a los gemelos.

-No os metáis en líos- les digo firmemente- luego me encontraré con vosotros
-Si Sky- murmuran con desdén justo antes de desplazarse entre las personas

Me giro de nuevo para mirar a Jeff, pero a vuelto junto a Lauren delante del grupo de los nuevos, me mira y con la mirada me dice que me acerque. Cuadro los hombros, respiro profundamente y me dirijo hacia ellos. Lo bueno es que no tengo que sonreír falsamente como haría cualquier guía turística al enseñar a los turistas la ciudad. Veo a la gente curiosa irse, ya han visto a los nuevos, han visto lo que han querido y ahora se van, solo se quedan algunos interesados y los que tienen que continuar vigilando las costas.

Al llegar al lado de Jeff, me dirige una mirada y yo saludo a Lauren y a Matt, luego me giro hacía los nuevos al mismo tiempo que Jeff comienza a hablar.

-Bueno, a todos ya os imagináis que en este barco se encuentran supervivientes y nos dedicamos a buscar junto a muchos más barcos a mas de vosotros, por lo que ahora este será vuestro hogar, ahora aquí Sky os enseñará el barco y os explicará como funcionan las cosas.

Sin decir nada más, se van Jeff, Lauren y Matt se van sin decir palabra alguna, pongo los ojos en blanco y miro a los nuevos, los hombres parecen rodear a las mujeres como queriendo protegerlas, siempre pasa, piensan lo peor de este lugar.

-¿Saben? - digo mientras me cruzo de brazos - no tienen que actuar como si fuéramos peligrosos y os quisiéramos asesinar
-Nadie nos asegura de que no lo vayáis a hacer- dice el hombre de color, parece el líder del grupo
-Podéis pensar lo que queráis- ruedo los ojos al ver que están en guardia- no os vamos a quitar las armas ni nada por el estilo aquí cada uno tiene sus cosas, pero somos pacíficos y nos dedicamos a buscar supervivientes, como vosotros
-Ya nos hemos encontrado a personas como ustedes diciendo lo mismo, no eran mejores que los zombies
-Esto es tan cansado - murmuro y veo que la chica joven me mira mal- de nuevo, no somos asesinos, yo llevo aquí varios meses y sigo de una pieza, aquí vivimos y convivimos, cada uno se ocupa de algo y vamos por las costas buscando a gente como nosotros para intentar que la raza de la humanidad no se extinga porque al paso que vamos desapareceremos, así que por favor relajaos, ¿vale?
-¿Que seguro tenemos de que no nos harán nada?- Pregunta ahora, el chico joven
-¿El que no hemos hecho nada ?, mirad yo tengo aquí, dos hermanos, y vivimos tranquilamente, trabajamos y convivimos con el resto, ahora, si no queréis perder más el tiempo os explicaré como funcionan las cosas, y donde dormiréis - siguen mirándome con recelo, pero están algo más relajados - Ahora, comencemos de nuevo, ¿Si?, lo primero me llamo Sky y seré como vuestra guía turística- intentó bromear para aligerar el ambiente, no funciona mucho, pero al menos la niña me sonríe así que eso ya es algo -Como ya he dicho, el barco se dirige por las costas en busca de supervivientes, a mí me recogieron de España, y la última vez que estuvimos en costa fue en Indonesia, aquí dentro tenemos a gente de todas las nacionalidades y lugares, nos dedicamos a buscar, e intentamos vivir como podemos, no somos malos, ni asesinos - intento asegurarles de nuevo.- Como os habréis dado cuenta esto era un buque de guerra, por lo que no es un barco de crucero todo de lujo, aquí dormimos separadas por sexos, hombres y mujeres a parte, suelen dejar juntos a las familias, padres e hijos que juntan a varias en varias habitaciones, pero solo si los hijos son niños, si son adultos se les separan, así se ahorra espacio para más personas, las duchas y baños con comunes, están también separados por sexos. Hay solo un comedor con dos cocinas, la gente aquí se dedica a lo que se le da mejor, por ejemplo las personas que quedan en cubierta- señalo a los que aun están vigilando las costas- se encuentran vigilando para ver si divisan supervivientes. Si se te da bien cocinar te ponen el la cocina, limpiando, en enfermería, ayudando … todo depende de lo que se os dé bien y de lo que podáis aportar y así

Veo que me miran fijamente, y si, lo se, no soy de las que se explican mejor, por eso no se porque Jeff me ha pedido que haga esto. El hombre de color se me acerca y resisto la necesidad de dar un paso atrás hasta que extiende la mano en forma de presentación.

-Brandon - se presenta justo cuando estrecho su mano, me suelta y se gira a mí lado- ellos son Flyn- señala al hombre albino- Noah - señala al que es poco mas mayor que yo, sigo sin poder bien su cara- Alex- el hombre que me da mal royo - ellas son Mary - la mujer embarazada - Valeria - la niña- Aria- la chica joven que me mira mal
-Un placer- murmuro - Ahora os enseñaré el lugar

Aproximadamente una hora después ya les he enseñado todo, y les e dicho donde se encuentran los mapas del lugar por si se pierden… es muy común perderse aquí, en especial al principio. Al parecer los hombres se van a quedar en la misma habitación en donde se encuentran mis hermanos, y esa idea no me agrada mucho, no les quiero a ellos en el mismo espacio donde está ese tal Alex, en serio no me gusta nada. Las chicas se van a quedar al parecer en el mismo lugar donde duermo yo, por lo que ahora seremos más en un espacio reducido.

Cuando ya por fin he acabado de trabajo de guía turística me dirijo a buscar a mis hermanos, que supongo que estarán en lo que llamamos “Espacio B”, una gran sala donde había un montón de armas y suministros que por supuesto se han ido acabado y ahora es un espacio para pasar el tiempo libre. Al entrar veo a Dani en un pequeño sofá leyendo muy concentrado un libro, algo que yo no podría hacer por culpa del ruido. Con la mirada busco a Alvaro y le veo junto a un montón de chicos más o menos de su edad jugando a las cartas, hoy al parecer va a ser un día tranquilo. Camino hacia el sofá dónde está Dani y me dejo caer a su lado, él no aparta la mirada del libro, y yo por primera vez en el día sonrió. Antes de darme cuenta me duermo

Un ruido me despierta, intento orientarme, sigo en el Espacio B, no sabía que me había quedado dormida. Dani, a mí lado también se despierta, al parecer al igual que yo se había dormido aunque acurrucado junto a mí, y a mi izquierda Alvaro está en la misma tesitura. Pero me encuentro en alerta, el reloj de la sala indica las seis de la tarde, y yo había entrado en la sala a las 12 de la mañana, al parecer hoy después de mucho tiempo he conseguido dormir. Todo está sospechosamente silencioso, y no es del todo raro, si no hubiera sido por ese grito, poniendo a mis hermanos detrás de mí, camino hacía la salida atravesando la sala totalmente vacía, algo muy raro también. Salimos y comenzamos a caminar, en un principio sin un rumbo fijo, hasta que justo antes de cruzar uno de los pasillos lo veo, un maldito zombie, un chillido comienza a florecer dentro de mí, quiero dejarlo salir con tantas ganas, pero no puedo, así que hago todo lo posible para no gritar, tiro de mis hermanos hasta una esquina oscura, esto es peligroso y no tenemos armas, no aquí. Ellos han comprendido la situación, Alvaro está algo emocionado, le gusta la acción pero a la vez tiene miedo, por el contrario Dani está temblando, el no es un chico de acción, tiro de ambos hacía una pequeña habitación de suministros, al asegurarme de que está vacía los meto dentro, beso a ambos en la frente.

-Volveré con armas, vosotros quedaos aquí, y pase lo que pase, no abráis, por favor- les ordeno, a la vez que les suplico, ambos asienten con la cabeza- jurarlo
-Si- dicen ambos, vuelvo a besarles y me despido cerrando tras de mí, escucho el cerrojo

Comienzo a caminar silenciosamente y atenta en dirección a mi camarote. Allí tengo mi bolsa de emergencias, ropa, agua y armas. Pero antes de querer darme cuenta algo se tira sobre mi espalda, haciendo que me golpee contra la pared fuertemente con la cabeza, me siento mareada pero lúcida, me volteo rápidamente y el maldito zombie quiere morderme, siento su hambre y es repugnante. Aun tiene aspecto humano, por lo que supongo que no ha venido de fuera, pero entonces ¿Como?. Entonces le miro la cara, y le reconozco es uno de los nuevos, venía infectado.

Gruño y le empujo hasta que el golpea la pared. No tengo nada con que golpearle, nada, así que hago lo único que se me ocurre hacer, poniendo mis manos en su cabeza, intento, con todas las fuerzas golpearla con la pared, lo que provoca un fuerte y agudo sonido, pero no le he hecho nada, vuelvo a golpearle, una y otra vez hasta que al final consigo hundir su cráneo. Lo veo deslizarse por el suelo, dejando un rastro de sangre negra en la pared, cuando algo me empuja hasta el suelo y antes de que pueda reaccionar lo tengo encima, dirigiéndose hacía mi yugular, y en ese momento lo se, voy a morir. Mierda. Antes de querer darme cuenta sangre gotea sobre mi cuello y me doy cuenta que la cabeza del zombie a sido atravesada por un cuchillo, alguien me lo quita de encima y me ayuda a levantarme.

Aun sigo algo mareada y desorientada, murmuro levemente un gracias y cuando alzo la mirada veo a dos de los nuevos, Aria, que es la que me a salvado y Noah, ambos miran el cuerpo zombie de su compañero Alex.

Comentarios

Este Blog está dedicado a reseñas de Libros, películas, series, mangas y animes. Amo tantas cosas y no hay tiempo suficiente para disfrutar de todo, pero hay que disfrutarlo cada momento. Espero que disfrutéis leyendo el Blog tanto como yo escribiéndolo. No dudéis en escribir y comentar tu opinión de las reseñas o sugerir ideas. Aprecio cada momento de vuestro tiempo que le dediquéis a este pedazo de mi alma que os muestro. Muchos besos♥